Piedras tacitas, naturaleza y espacios rituales en Cerro Blanco, comuna de Recoleta

Erigido en la comuna de Recoleta y administrado por el Parque Metropolitano, el Cerro Blanco constituye uno de los hitos más significativos de patrimonio prehispánico de la ciudad de Santiago. Los pueblos originarios —quechuas y picunches— le asignaron una connotación religiosa y lo emplearon como centro ceremonial: en su ladera norte yace el complejo de piedras tacitas más grande de América. La historia de estos vestigios ha conocido diversas formas de disputa, materiales y simbólicas: desde los conquistadores españoles hasta nuestros días, han convergido en Cerro Blanco los usos más diversos. En los últimos años, la administración por parte de organizaciones indígenas ha enfrentado un duro revés, reactivando una vez más su carácter de arena política. Así, aunque las comunidades no han llegado a un acuerdo con la Municipalidad, sus actividades cotidianas desafían el mandato del controlador legal del Cerro, y dan forma a una lucha por la recuperación de este simbólico y ancestral espacio.